"...La mayoría de las gaviotas no se molesta en aprender sino las normas de vuelo más elementales: como ir y volver entre playa y comida. Para la mayoría de las gaviotas, no es volar lo que importa, sino comer. Para esta gaviota, sin embargo, no era comer lo que le importaba, sino volar. Más que nada en el mundo, Juan Salvador Gaviota amaba volar..." Para leer el libro completo, haz clic aquí

lunes, 28 de marzo de 2011

La Jaula de los Siglos (ensayo)

¿Cuales son los temores que hacen que la gente se niegue a la verdad aun cuando es evidente?  Cuando alguien le quita la mascara al enemigo, ellos se ponen el antifaz para no tener que ver. ¿Cuántas estructuras mentales implica ese antifaz? ¿Con que tranquilidad duermen por la noche mientras basan sus realidades en un mundo de mentiras? Mientras sus hijos crecen en un mundo de mentiras, que pudo haber sido mejor, desde el instante en que una verdad llego a sus manos, y optaron por desecharla.

A veces parece que todavía de adultos seguimos viviendo en castillos de cristal. Tras la búsqueda de seguridad nos quedamos encerrados en una fantasía, tan confusa como peligrosa. Y al igual que en nuestras casas, levantamos arábigas rejas hasta quedar encerrados dentro. Cual psicópata vestido de Príncipe, o de Rey, miramos al padre de Mickey sin ver el bigote de Hitler que se escapa del falso maquillaje.

Siempre nos enseñaron que es mas difícil construir que destruir, que lo que lleva años construir, se deshace en minutos. ¿Qué miedo tenemos de tirar abajo toda esta falacia? En pocos días habremos triunfado en el mundo.
El problema es que no tenemos la solución, y también, que nos tocaría reconstruir algo que no sabemos QUÉ ni COMO.
Pero hay cosas que son tan fáciles de hacer, sin revueltas, sin violencia. 

Quizás nadie quiera ser arrancado de su rutina diaria, incluso cuando eso implique el riesgo de vida de sus hijos. ¿Quien quiere dejar de ser ama de casa para salir a juntar firmas por una causa común? Nos domesticaron como ovejas sin coraje, y ojo con aquel que ose salirse del molde! Será despreciado hasta por sus familiares, si no por sus propios padres. “porque se salio de la regla”. Y esa mirada de vieja ofuscada, penetrante acusadora, con la boca torcida hacia el más bajo de los prejuicios, profundizando cada arruga tallada por los años de amarguras y de jaulas psicológicas. Hoy extienden su jaula hacia vos, porque así es como tiene que ser. Y cual escultor loco, te van tallando, no hasta la belleza, sino hasta el desgaste. Y el resultado es un monigote informe, ensalada de curvas perfectas que no son nada, que no dicen nada. Y siguen raspando, puliendo, siempre hay algo mas que reclamar.

La erosión posesiva del conservador, del tradicionalista, se entremezcla paradójicamente con los avances tecnológicos y los gritos de libertinaje del absurdo.
Y mientras te sientes audaz y transgresora porque muestras tus partes y le abresl as piernas a todo el que deseas;  mientras te piensas osado en la novedad de rodearte de plástico, bits y botones;  sigues teniendo la mente enquistada como una nuez, la misma de un ama de casa del siglo IV, o quizás peor...

Daniela Sbarbatti

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